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¿Cómo practicar agility con tu perro?

Si te gustaría saber cómo practicar agility con tu perro, te introduciremos a lo largo de este artículo de qué trata y los beneficios que tiene para ambos, can y dueño. Aunque es una práctica que se suele emplear en competición, cada vez son más personas que lo manejan como una diversión, a beneficio de sus mascotas.

¿De qué trata lo que llamamos agility y cómo se realiza?

Esta técnica data del año 1978 y tenía como intención entretener a un público, emulando a las conocidas carreras de caballos. Poco a poco, supo ganar terreno en la competición de animales, hasta llevarse a cabo de manera profesional.

En la actualidad, una vez comprobados los beneficios que significan para nuestros amigos, los perros, y el vínculo tan importante que se genera entre mascota y amo, se recomienda esta práctica como una forma de juego.

Agility hace referencia a un circuito de obstáculos, el cual tu perro debe ir superando. Se encontrará con distintos tipos de metas a alcanzar. Para lograr pasarlas, se requiere entrenamiento previo, donde el can aprenderá a vencer ciertos miedos y a ganar seguridad en sí mismo.

Debes tener en cuenta que tu mascota no entiende de competencias. Para ella todo supone un juego, siendo en esta área donde logra fortalecerse el vínculo contigo. El objetivo último no es que consiga a la perfección completar el circuito, sino que, a cada entrenamiento, os divirtáis juntos, como parte del juego, mientras ambos aprendéis uno del otro.

Lo primero a tener en cuenta es la edad de tu compañero. Se recomienda que haya superado los 18 meses y que tampoco esté en una edad avanzada. Al ser un deporte que requiere mucha destreza física y energía, el perro debe estar en perfecto estado de salud. No por ello, esto significa que uno más mayor no pueda jugar. Debes adaptarle el juego a las condiciones de tu perro, a pesar de la edad y el tamaño que tenga.

Con la práctica del agility encontrarás rampas, túneles, balancines, vallas, obstáculos para saltar y muchas cosas más. Correr a su lado le motivará para resolver cada obstáculo. Tu perro sabrá que lo ha superado bien cuando reciba un premio, con el que le motivarás para seguir jugando.

Las posibilidades son muy numerosas, así como las combinaciones que puedes crear cada día.

El vínculo entre tu perro y tú se acrecienta

Para tu mascota, realizar este circuito significa jugar contigo, además de recibir una recompensa por cada meta que logra. Entre los beneficios que consigue, están:

– Un aumento en su agilidad y mejor condición física.

– Un mayor estímulo a seguir tus órdenes, estrechando lazos contigo.

Más seguridad al estar a tu lado.

– Mejor relación con otros perros y con terceras personas.

– Conseguirá relajarse más en caso de que sea nervioso. El ejercicio le ayudará a descansar mejor.

Existen muchas academias donde te enseñan cómo practicar agility con tu perro. Pero solo encontrarás una tienda donde darle el mejor premio por cada meta superada. Tu mascota siempre te sabrá agradecer estos momentos especiales.

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